La rivalidad existente entre la
gasolina y el diésel es un “pique” como otro cualquiera como lo
puede ser el invierno y el verano, la derecha y la izquierda o
Ferrari y Porsche.
La particularidad es que con estos tan
díficiles que corren en cuanto a la economia, hace que este asunto se
mire especialmente con lupa.
Y al igual que las otras comparaciones
cada parte tiene sus clichés que en muchas ocasiones son infundados
o por el contrario, fundados para el provecho de unos.
Para ir entrando en materia, os he de
decir que estais en lo cierto todos aquellos que pensais que el
diesel es más barato, a pesar de que se deba a temas meramente de
impuestos, y que además los vehiculos propulsados por este
carburante tienden a recorrer mayor distancia a igual cantidad de carburante que los gasolina.
Por otra parte, y si atendemos a algo
que esta tan de moda como las emisiones de CO2 , veremos
que por un ligero margen son inferiores las del diesel tambien.
Hasta el momento, todo parecen ventajas
y parece que la elección es mas facil que el “uno mas uno dos”.
Sin embargo el diesel emite unos oxidos muy contaminantes de nitrogeno y lo más nocivo material particulado, de modo que no es la alegría de la huerta que se diga.
Esta “trifulca” que se traen los
dos tipos de combustibles por excelencia, viene desde muy atrás, de
hecho , tiene su inicio cuando Otto (gasolina) y Diesel (gasoleo)
idearon sus motores.
No hace mucho tiempo la balanza estaba
bastante desequilibrada hacia el diesel ya que las emisiones eran
menores en el caso del los diesel, probablemente debido a que los
vehiculos a gasolina funcionaban por carburacion, lo que hacia que
mucha gasolina se expulsara a la atmosfera sin nisiquiera haberse
quemado.
Pero como “No hay mal que 100 años
dure”, los gasolina tomaron la ventaja cuando se introdujo la
electronica en la mecanica y con ella una mejor eficiencia ademas de
un mayor provecho del combustible.
De modo que en un pasado muy reciente
la gasolina se impuso por lo que parecia para largo, pero por razones
un tanto turbias el diesel avanzo mucho y se opto por desarrollarlo
muchisimo mas que sus “compis”,los gasolina.
Llegados a este momento, la gasolina se
veia en una situacion de no retorno e incluso en una especie de
boicot promovido por unos pocos, y es que las razones que se
empezaron a dilucidar para el consumo de vehiculos diesel empezaron a
ser un tanto “poco creibles”.
En la actualidad en España, 7 de cada 10 coches que se venden son
diesel. Y lo cierto es que practicamente la totalidad de estos
vehiculos diesel llevan una pegatina que dice Blue-Efficiency,
eco-motive, blue motion... 
Es curioso entonces como los vehiculos
que más sustancias nocivas expulsan por sus tubos de escape alardean
de ser los que menos contaminan. Y ustedes se preguntarán;
“caramba!, si los diesel de ahora ya no echan esas humaredas que
echaban hace años!” Es una cortina de humo, nunca mejor dicho, ya
que se equipan de catalizadores y filtros que retienen esas
particulas de ollín, etc pero los gases no salen del todo depurados y
siguen emitiendose gran cantidad de moléculas dañinas no sólo para
la salud sino para el medio ambiente.
Buena prueba de ello resulta el proyecto que se trae entre manos el ayuntamiento de París de no permitir la entrada de los vehiculos diesel a la capital, y sino se pudiera tomar la medida tan radical , al menos, seguir el ejemplo de capitales como Beijing que cada día permite el transito de unos vehiculos segun si su enumeración de la matricula es par o impar.
Visto con prespectiva, resulta
irrisorio ver que cambio de direccion ha dado el marketing
automovilistico en el sector de los vehiculos diesel que ha escogido
justamente como slogan lo que más deberia haberse callado.
